Allí en el Arsenal, Wenger lo cambió a la posición de centrodelantero, alineándolo recurrentemente con el veterano delantero neerlandés Dennis Bergkamp para que sirviera como el socio de «Tití» para crear jugadas de peligro en la portería rival. Este encuentro le pasó factura, ya que en un encontronazo con Iker Casillas al transformar su segundo gol, sufrió una lesión en su rodilla por la que se perdió la final de la Copa del Rey, camiseta de francia en la que el equipo blaugrana conquistó el primer título de la temporada 2008/09 tras derrotar al Athletic Club por 1-4 en el campo de Mestalla.