A finales de 2019 se confirmaba que el español tendrá una estatua en su honor en Roland Garros, situada al lado de la mítica pista central Philippe-Chatrier. Al poco tiempo, la representante de Mika se dio cuenta de que los boletos ya habían llenado la capacidad del estadio y decidió que sería un concierto solo de él. Durante los siguientes meses, el club disputó varios partidos amistosos contra equipos de diferentes puntos de España, para así completar la temporada.